Licitación y devolución del espectro
La semana pasada el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) informó que había comenzado el proceso de consulta para la futura licitación de frecuencias para servicio inalámbrico.
El objetivo es darle al mercado este insumo básico para la implementación y desarrollo de tecnologías de última generación, como es el caso de 5G. Con ello se podría soportar soluciones para hogares, edificios y ciudades inteligentes, video 3D, trabajo y juegos en la nube con baja latencia, servicios médicos a distancia, realidad virtual y aumentada, entre otros.
La consulta pública es para saber cómo configurar el tamaño de los bloques y pedir opinión sobre límites de acumulación de espectro. También se busca encontrar incentivos de participación y las fechas más adecuadas para el inicio del proceso.
Para servicios de telecomunicaciones móviles internacionales (IMT, por sus siglas en inglés) se licitarán 330 MHz nacionales. El IFT buscará que entren nuevos jugadores, sobre todo para dar servicios en zonas desatendidas o subatendidas. La consulta se acaba en 3 semanas, es decir el 3 de febrero.
Hasta aquí todo bien, sin embargo, en paralelo nos encontramos con la revelación de Marco Mares (¡Hola, Marco!) en el sentido de que AT&T devolvió al IFT parte de sus frecuencias. ¡Zaz! Al principio yo pensaba que se trataba de frecuencias relacionadas con tecnologías en desuso o redes apagadas, pero me informan que no.
Hasta el cierre de esta columna no pude confirmar cuántas y en qué bandas del espectro se encontraban esas frecuencias. Lo que sí es un hecho es que AT&T se suma a esa mala noticia de la devolución de espectro.
En ese sentido, consultada al respecto, la empresa nos da su posición oficial de esta medida. “Esta transacción ha sido parte de la estrategia de portafolio de espectro de AT&T, en donde se han tomado en cuenta diversos factores, incluyendo el costo del espectro. La empresa ya ha señalado anteriormente que México tiene uno de los costos de espectro más caros, lo cual ocasiona que haya menos personas conectadas, al poner en riesgo las inversiones y generar barreras a la competencia”.
Y tiene razón, el uso de las frecuencias en México es hasta 3 veces más caro que en otros países y por eso se complica el panorama para el mercado y la futura licitación. Si AT&T está devolviendo frecuencias, lo mismo que hace unos años hizo Telefónica Movistar, quiere decir que cada vez son menos los interesados en ofrecer los servicios de comunicación inalámbrica. Luego entonces, si hay menos apetito, habrá menos participantes en la futura licitación.
Si hay menos empresas interesadas en recibir una concesión para comunicaciones inalámbricas, habrá menos penetración de estos servicios. Por lo mismo, será muy difícil reducir la brecha digital que tanto hemos añorado tanto la población como el Gobierno Federal.
Podrías pensar que el gobierno de la 4T está cayendo en un contrasentido pues no trabaja en reducir la brecha digital. Sin embargo, debemos recordar que el cobro de derechos por el uso del espectro lo fija del Poder Legislativo. Entiendo que el Ejecutivo podría hacer un esfuerzo y ajustar sus expectativas de recaudación a fin pedir a los legisladores la reducción en el cobro de derechos. Sin embargo, no se ve aun la voluntad política para hacerlo en ninguno de los dos poderes.
En ese sentido, creo que por más esfuerzos y buena voluntad que tengan los pupilos de Rogelio Ramírez de La O en la Secretaria de Hacienda y de Jorge Nuño en la Secretaria de Infraestructura Comunicaciones y Transportes; no será posible bajar el cobro de derechos y abaratar el costo del espectro, hasta que vivamos un cisma en el sector. El fracaso de la licitación y la devolución de frecuencias puede ser ese punto de inflexión.
Espero que no lleguemos a eso y podamos encontrar un punto de equilibrio para no afectar la recaudación y las finanzas públicas, pero al mismo tiempo dejar de asfixiar a los operadores y al mercado.
Logística transfonteriza y digital
Ahora que se acabaron las reuniones de los líderes de Norteamérica, queda en el ambiente una suerte de optimismo por lo que puede venir para el comercio en la región. En ese sentido, y de cara a los beneficios del llamado nearshoring, cobra relevancia el papel que los servicios de logística pueden jugar en el comercio exterior, sobre todo entre México y Estados Unidos.
Por eso la apuesta de una empresa startup Mexicoamericana especializada en logística transfronteriza resulta muy interesante.
La empresa mexicana BBA Logistics, encabezada por el joven empresario sinaloense José Balderrama Félix, es un broker digital estadounidense, que se enfoca en ayudar a que empresas de todo tipo de sectores crucen con su mercancía entre ambos países. Fundada en 2018 en EU, su objetivo es atender al sector productivo del noroeste del país, y con la mira en las Pymes como sus principales clientes.
Su sistema, no solo app, es parecida a plataformas como InDriver, donde el transportista compite mediante el modelo de subasta inversa, para saber si se queda con el viaje.
Como son brokers especializados en el cruce transfronterizo, no piensan adquirir camiones. Ellos saben que el jale está en darle confianza al cliente productor de que sus materiales o mercancías lleguen a tiempo y en las condiciones correcta. También le dan al transportista la certeza de que recibirán el pago en menos de 30 días.
Todo fluye a través de su Transport Management System (TMS) el cual podría estar totalmente automatizado en un período de dos o tres años.
Si bien su sede fiscal está en Las Vegas, su operación se da principalmente desde Los Mochis, Sinaloa. Ahí fueron perfeccionando ese modelo de negocio que permite a los productores estadounidenses entender con mayor éxito los tiempos, los trámites, los procesos y hasta las mañas que se dan en territorio mexicano.
El CEO de BBA Logistics considera que este año se consolidarán como líderes en el mercado con transportación de mil unidades al mes. Actualmente cuentan con más de cuatro mil choferes afiliados a la plataforma digital. Desde el primer día, han sido rentables y en 2022 cerraron con ingresos cercanos a 20 mdd.
Para 2023 esperan tener su tercer año de crecimiento de tres dígitos y vender su TMS mediante el modelo de Software as a Service (SaS). También piensan abrir dos oficinas operativas más este año en la CDMX y Monterrey y en futuro cercano comenzar a trabajar el modelo de factoraje.
Piensan levantar capital este año para consolidar otras líneas de negocios por lo que, te recomiendo, síguele la pista.